Si quieres que el sexo anal sea una experiencia de 10 y no un desastre de terror, aquí te dejamos la guía definitiva para hacerlo bien y, sobre todo, disfrutarlo 🔥. Esta zona tiene un montón de terminaciones nerviosas que, si se estimulan de la forma correcta, pueden generar sensaciones de placer brutales 🤤.

Uno de los errores más comunes es pensar que el sexo anal es igual que el vaginal y que se puede ir directo a la acción. ¡Error! El esfínter necesita tiempo para relajarse y acostumbrarse. Si intentas forzarlo, la experiencia será más incómoda que placentera. Tómate tu tiempo, usa los plugs, masajea la zona y verás que la espera vale la pena 😉.

1. Tu cuerpo y tu mente tienen que estar listos ✅

Antes de lanzarte a la aventura, hay que entender cómo funciona tu cuerpo y tu cabeza:

• El esfínter anal es un músculo que, si se asusta, se cierra más que almeja en peligro. La clave está en la paciencia, la relajación y empezar poco a poco e ir de manera gradual.
• Tu mente también juega un papel clave. Si estás tensx o con dudas, lo mejor es hablarlo con tu pareja y asegurarte de que ambos estén en la misma página. La confianza y la comunicación lo son todo.

2. Los plugs y bolas anales son tus mejores amigos 💎

No hay prisa, así que empieza con un plug anal o con unas bolas anales. Ambos son perfectos para entrenar la zona y acostumbrarte a la sensación. Empieza con tamaños pequeños y ve subiendo el nivel según cómo te sientas. Además, ayudan a que el esfínter se relaje y no haga huelga de entrada.

3. El lubricante es sagrado 💧

El ano no se lubrica solo, así que necesitas un buen lubricante para que todo fluya como debe ser. Tienes varias opciones:

• A base de agua: Fácil de limpiar y seguro para los juguetes. Dentro de estos hay:
  • Relajantes: Ayudan a que todo sea más fácil y sin tensiones.
  • Desensibilizantes: Adormecen un poco la zona para evitar molestias.
  • Estimulantes: Dan un toque de hormigueo que puede hacer que la experiencia sea aún más intensa.
• A base de silicona: Estos son los reyes del deslizamiento. Duran un montón y son perfectos para el sexo anal porque garantizan que todo fluya sin necesidad de reaplicar cada dos minutos, además de que una de las claves fundamentales en el sexo anal es ésta, que haya mucho deslizamiento.

4. Reglas de oro para evitar sustos y malos ratos ☝️

Para que todo sea puro placer y nada de problemas, ten en cuenta esto:

• Nada de sexo vaginal después del anal sin antes lavar bien todo, porque las bacterias pueden hacer de las suyas.
• No alternes entre oral y anal sin limpieza previa, porque eso puede ser un boleto directo a una infección.
• Si usas juguetes, lávalos bien después de cada uso.
• Usa condones, sobre todo si hay cambio de pareja.
• Ve al baño antes de empezar para que todo esté en orden y te sientas más cómodo/a.
• Si quieres estar extra seguro/a, puedes hacerte un lavado intestinal con un enema, usando agua tibia y productos diseñados para eso. No es obligatorio, pero puede ayudarte a sentirte más confiado/a y disfrutar sin preocupaciones.

Siguiendo estos consejos, el sexo anal será una experiencia divertida, placentera y sin sustos. Así que ya sabes, tómalo con calma, elige bien tus juguetes y lubricantes, y, sobre todo, disfrútalo. 😉